SOSTENIBILIDAD

›PLANTÓN POR UNA BUENA CAUSA‹
CÓMO LOS COLABORADORES DEL BIB PLANTAN SOSTENIBILIDAD


El ambiente es húmedo y frío, y el cielo brilla en el gris otoñal. Al observar los árboles se podría pensar que nunca habían brotado hojas de ellos. Noviembre en Alemania. Hay meses más agradables para un largo paseo por el bosque. Pero a pesar de ello, todos los colaboradores del BANK IM BISTUM ESEN se pusieron juntos en marcha el año pasado para visitar una parte del bosque cerca de Ratingen. Por una buena razón: devolverle algo a la naturaleza y, al mismo tiempo, conocerla mejor.


Quien habla mucho sobre el tema sostenibilidad como el BIB también debe ser medido por sus hechos. La reflexión para el viaje común era volver a las raíces de la idea de sostenibilidad, a la industria forestal. Hace 200 años, Hans Carl von Carlowitz acuñaba como jefe forestal de la Corte del Electorado de Sajonia por primera vez la idea de que la madera y los bosques se debían preservar a largo plazo.

Su objetivo era no permitir cortar más árboles de los que se podían replantar. Manejar las materias primas de la naturaleza de forma sostenible para poder vivir también en el futuro de éstas. Pero el bosque no sirve sólo como biótopo para la flora y la fauna. Sus árboles son los principales pilares para frenar la contaminación de la tierra con los gases de efecto invernadero y combatir el cambio climático.
  • Stacks Image 4359

    Caption Text

    Link
  • Stacks Image 4360

    Caption Text

    Link
  • Stacks Image 4361

    Caption Text

    Link
  • Stacks Image 4378

    Caption Text

    Link
  • Stacks Image 4379

    Caption Text

    Link
  • Stacks Image 4380

    Caption Text

    Link
  • Stacks Image 4381

    Caption Text

    Link
  • Stacks Image 4382

    Caption Text

    Link
  • Stacks Image 4389

    Caption Text

    Link
  • Stacks Image 4395

    Caption Text

    Link
  • Stacks Image 4396

    Caption Text

    Link
  • Stacks Image 4397

    Caption Text

    Link
JUEGOS, DIVERSIÓN Y PALAS

Una vez en el bosque, el guarda forestal Christoph Menzel del bosque privado Graf Spee dio la bienvenida a los colaboradores del BIB, y les explicó cómo debe ser plantado correctamente un joven árbol. Poco después, a todos se les permitió demostrar que habían seguido correctamente las explicaciones del guarda forestal. Equipados con una sólida pala en una mano y un pequeño plantón en la otra, las colaboradoras y los colaboradores se alegraban de realizar su pequeña contribución a la preservación del bosque y el clima.

Entre la maleza prolífera del suelo del bosque buscaban varillas de madera clavadas en el suelo que indicaban los puntos para los árboles jóvenes. Con dos o tres golpes secos hundían la pala en el suelo y cavaban pequeños agujeros para los plantones. En un momento estaban anclados casi 100 árboles jóvenes en la tierra. Después de esta exitosa experiencia, el guarda forestal Christoph Menzel llevó a los jóvenes botánicos del BIB a un viaje de descubrimiento a través del bosque y explicó cómo funciona una industria forestal sostenible.

Pero el día en el bosque estaba lejos de terminar. Un joven de 15 años de edad de Duisburgo explicó a los empleados del banco la importancia que tiene la plantación de árboles en todo el mundo. Jona, de la organización global de estudiantes 'Plant-for-the-Planet', se moviliza junto con muchos otros niños, como embajador climático, para plantar más árboles y así combatir el cambio climático.

En reconocimiento a este trabajo, Heinz-Peter Heidrich, vocero del BIB, entregó un cheque de 2.560 euros a 'Plant-for-the-Planet' después de la charla de Jona. Por cada miembro del BIB un euro para un árbol respectivamente.


Aprender sobre bosques y prados a través de juegos

Una yincana por el bosque demostró al finalizar el día que incluso jugando se puede aprender sobre árboles y bosques. Tras formar equipos de 10 a 12 personas mediante un sorteo, las colaboradoras y los colaboradores se contagiaron de ambición deportiva.

Los equipos debían superar un total de seis estaciones con diferentes tareas. »¿Cárabo, pinzón o arrendajo?«; adivinar los tipos de canto de los pájaros era sólo una de las seis estaciones. El lanzamiento de piñas de abeto también causó gran diversión: uno de los miembros de cada equipo tenía que levantar una cesta de mimbre y atrapar las piñas lanzadas por sus colegas. Para serrar un tronco se requería sobre todo fuerza y coordinación. Con el homenaje al equipo ganador terminó, finalmente, un viaje de empresa sostenible.

Daba igual que fuese la Junta Directiva o un aprendiz. Los colaboradores del BIB no sólo han partido conjuntamente hacia las raíces de la sostenibilidad, también han hecho una pequeña contribución para ponerla en práctica. Con juegos, diversión y palas.